Llegada a Lima y primeras impresiones de Perú
Cuando buscas un viaje a Sudamérica, como es el caso de Perú, uno de los puntos más importantes es el vuelo. No son baratos, aunque si se cogen con bastante antelación y se tiene un poco de suerte, puede salir bien. En nuestro caso volamos con Iberia, después de tantear con la opción de otras compañías. Al final, al ser vuelo directo y también los horarios que había, hizo que mereciera la pena pagar un poco más antes de pasar largas horas en escala en un tercer país. El vuelo Madrid-Lima dura casi 12 horas.

Aeropuerto de Lima: sacar dinero y cómo ir al centro
Un vuelo tan largo siempre se hace pesado. Pero entre que ves alguna película, las veces que ponen para comer y un rato durmiendo, cuando te das cuenta ya casi estás en el destino. Salimos a las 13:05h desde Madrid y llegamos algo pasadas las 19:00h hora local en Lima. En algunos casos puede ser mejor llegar temprano; en otros igual lo ideal es llegar casi de noche para dormir y así sincronizar el horario y sufrir menos jet lag. Consejos para evitar el jet lag hay muchos.

Como anécdota, en nuestro vuelo llevaban un preso. La Policía Nacional llegó hasta el mismo avión con varios coches y entraron al preso, que se sentó en la última fila. Todo el trayecto, lógicamente, iba custodiado por dos policías hasta llegar a Lima.
Nosotros prácticamente no teníamos mucho margen para hacer cosas ese día. Lo primero fueron los trámites típicos al llegar a un nuevo país que básicamente son pasar el control de inmigración, conseguir moneda local y buscar la manera de llegar al centro.
El control de inmigración no fue excesivamente lento. Es cierto que había muchísima gente, pero pasaban rápido. En nuestro caso, al ser españoles, no necesitábamos visado y todo se reducía a mostrar el pasaporte, sello y listo. Un proceso rápido y ya estábamos dentro de Perú.
Sí tardamos más en encontrar la manera de obtener moneda local, Nuevos Soles peruanos. Perú me recordó un poco a Tailandia en este sentido. En nuestro caso la idea era sacar del cajero, ya que tenemos la tarjeta de Ferratum Bank con la que no nos cobran comisión y nos hacen un precio calcado. (ACTUALIZACIÓN 2020: ya no existe Ferratum, pero seguimos recomendando Rebellion y Revolut). Sin embargo los primeros cajeros que vimos en el aeropuerto, todos cobraban por sacar.
Después de buscar, acabamos en la segunda planta del aeropuerto donde había varios cajeros juntos. Uno de ellos del BCP, Banco de Crédito de Perú. Al menos bajo nuestra experiencia, fue el único que no cobraba comisión al retirar del cajero. Pero hay que decir que tienen grandes limitaciones. Lo primero que solo te deja sacar una vez al mes y lo segundo que lo máximo que te permite retirar son 700 Soles que son 175€. Sacamos lo máximo que nos permitió para ir tirando los primeros días.
El siguiente paso fue buscar la manera de ir del aeropuerto al centro de Lima. Nos hospedábamos justo al lado de la Plaza de Armas. La verdad es que las opciones prácticamente se reducen al taxi. Hay autobuses locales (furgonetas compartidas), aunque para ello hay que salir fuera del aeropuerto, el recorrido es bastante largo (coger varios enlaces) y no está para nada orientado al turismo. Además, y esto lo he leído en varios blogs y también comentarios que nos dijeron allí en el país, el aeropuerto está en el distrito de Callao, una de las zonas más peligrosas de Perú.
Por tanto optamos directamente por buscar un taxi. Aquí taxis hay muchísimos y la cuestión es cómo elegir uno y cómo regatear. Porque sí, hay que regatear. Lo normal es que de primeras te pidan 100 soles. Quizás, con suerte, 80. Nunca te van a pedir menos. Pero, ¿cuánto cuesta realmente ir del aeropuerto de Lima al centro? No hay precio fijo.
Por lo que he podido leer en Internet y lo que nos comentaron allí en Perú, el precio normal suele ser de unos 60 Soles. Nosotros fuimos por 40 Soles (10 euros clavados). Lo cierto es que allí en el aeropuerto hay empresas de taxis que ofrecen trayectos “Desde 40 Soles”. Por tanto 40 Soles creo que es el precio mínimo a pagar y que está bastante bien. Igual alguien lo consigue por 30 por alguna circunstancia, pero sería algo fuera de lo común. 40-50 Soles es buen precio. También está la opción de Uber, que es lo que hicimos a la vuelta.
Primeras impresiones de Lima
Nos hospedamos en el Hotel Maury, a apenas una calle de la Plaza de Armas y catedral de Lima. La situación era inmejorable y el hotel, en general, muy bien. De hecho fue la opción más cara de toda la ruta de 15 días por Perú. Aunque eso de caro es relativo, ya que en Perú el alojamiento es muy barato.
La primera impresión que nos llevamos de Lima fue de una ciudad bastante más ordenada de lo que yo al menos imaginaba. Quizás lo esperaba más a lo Bangkok. Claro que el tráfico que hay es brutal, igualmente. Pero vi más orden en ese sentido.
Llegamos justo un día en el que el país vivía momentos de tensión. Acababa de dimitir el presidente y la situación era de inestabilidad. Nadie sabía exactamente qué iba a pasar. Había muchas protestas por las calles de Lima, incluso con barricadas y quemas de contenedores. No sabíamos nada de esto hasta nuestra llegada.
Y la verdad es que se notó y mucho. Nos afectó directamente, aunque por suerte acabó pasando poco a poco. Nos afectó ya que todo el centro de Lima estaba sitiado por la policía, militares y demás, y eso provocó que cerraran el acceso a la Plaza de Armas y a la catedral. Imaginad ir a Lima y no poder ver uno de los lugares más bonitos. Por suerte a lo largo del día siguiente ya permitieron el acceso.
Cuando llegamos al hotel, que por cierto el taxista no nos pudo dejar en la misma calle ya que estaba cortada por la policía, ya era prácticamente hora de dormir. Dimos una vuelta por las calles de alrededor para tener un primer contacto con Lima. Muchos restaurantes, mucho movimiento por las calles en general. Los precios, así de primeras, muy económicos, aunque esa noche no cenamos, ya que habíamos comido poco antes en el avión.
Sí fuimos al bar del hotel Maury, que es famoso por el pisco sour. Tiene una larga tradición desde que empezaron a servir esta bebida. Es un lugar muy conocido hoy en día y tienen su propia receta. El pisco sour es un cóctel que lógicamente lleva pisco, también zumo de limón y otros ingredientes como huevo. Está claro que no es el sitio más barato para probarlo. Un vaso pequeño aquí cuesta unos 4 euros (16 Soles).


Ese día no hicimos mucho más. Ya era tarde y llevábamos un día de viaje desde España y lo ideal en estos casos es dormir bien la primera noche para adaptar el horario cuanto antes. Al día siguiente tocaba ver Lima. Por delante dos semanas increíbles por un destino único.