Qué ver en una ruta de 4 días por Roma
Una ruta de 4 días por Roma puede ser más que suficiente para conocer los lugares más interesantes de la capital italiana. Es una ciudad con mucho para ver, pero muy accesible. Podemos decir que todo está relativamente cerca. En este artículo contamos nuestro viaje, día a día, visitando las zonas más importantes. Tuvimos tiempo suficiente para lo que teníamos planificado.
Qué ver en Roma en 4 días
Voy a mostrarte qué visitar en Roma en 4 días. Un viaje por lo principal de la capital de Italia. Es una ciudad donde vas a encontrar muchos lugares turísticos para conocer, pero que con este tiempo vas a tener de sobra para verlos sin problemas. En nuestro caso organizamos el viaje con el orden que te voy a mostrar y nos dio tiempo a todo.
Día 1: Museos Vaticanos y Basílica de San Pedro
El primer día de la ruta de 4 días por Roma lo dedicamos a conocer la Ciudad del Vaticano. Es un lugar imprescindible si visitamos Roma. Esta pequeña ciudad-estado guarda muchos tesoros entre sus muros. Es el país más pequeño del mundo y apenas cuenta con 800 habitantes. Su conjunto arquitectónico e histórico-artístico es espectacular y por ello fue declarado Patrimonio de la Humanidad.
Pero si hay algo que no podemos perdernos son los Museos Vaticanos. Eso fue lo primero que hicimos por la mañana temprano. Reservamos por Internet la primera hora disponible (9 de la mañana) y no tuvimos nada de cola. Es recomendable comprarlo antes y así evitarnos la fila que, en temporada alta, puede llegar a ser de varias horas.
Estos museos, propiedad de la Iglesia, guardan verdaderas joyas en su interior. Aquí podemos pasar perfectamente horas y horas. Los papas, año tras año, han ido acumulando colecciones muy extensas. Podemos ver colecciones egipcias, romanas, pinturas, tapices… Incluso una colección de carruajes de los papas.
Pero si hay algo que destaca por encima del resto es la Capilla Sixtina. Sin duda es la joya de los Museos Vaticanos. No dejan echar fotos ni vídeos.
La siguiente visita, y algo que tampoco puede faltar, fue la Basílica de San Pedro. Su construcción es sencillamente espectacular. La entrada es gratuita, aunque hay que hacer una cola que puede ser bastante larga. Te recomiendo que planifiques bien la hora y el día para esta visita, ya que como digo suele haber mucha cola.
Dentro podemos ver obras como la Piedad del Vaticano, de Miguel Ángel. Es la mayor iglesia cristiana del mundo. Un lugar que sin duda merece la pena visitar en 4 días en Roma.
Sí cuesta dinero subir a la cúpula. Esto es muy interesante para contemplar las vistas de toda la Plaza de San Pedro. Aquí vas a tener una magnífica panorámica.
Por la tarde, aprovechando los últimos rayos de sol, visitamos por fuera el Castillo de San Ángelo y el bonito puente junto a él, además de la Plaza Navona, Panteón de Roma y la famosa Fontana di Trevi.
Día 2: Coliseo Romano
El segundo día visitamos el lugar por el que mucha gente va a Roma: el Coliseo Romano. No podemos irnos de esta ciudad sin entrar en la que es considerada como una de las Siete Nuevas Maravillas del Mundo. No es para menos, con esta enorme construcción que se mantiene desde hace dos milenios. Un lugar que no puede faltar en una ruta de 4 días por Roma.
Nuevamente comenzamos la visita a primera hora del día y aprovechar bien el tiempo. En nuestro caso teníamos la Roma Pass, de la que hablamos en otro artículo. Es recomendable para evitar colas en el Coliseo de Roma y también ahorrar dinero.
Junto al Coliseo podemos ver el Arco de Constantino. Se inauguró en el año 315 para conmemorar la victoria de Constantino I el Grande.
De aquí partimos para el Foro Romano. Uno de esos lugares que siempre queremos conocer cuando oímos hablar de Roma. La entrada es conjunta con el Coliseo. Mucha gente opta por comprarla aquí para así evitar colas.
Este lugar es espectacular. Nos podemos hacer una idea de lo que llegó a ser el esplendor de la Antigua Roma. Puedes perderte por aquí de forma libre.
La siguiente visita que realizamos ese día fue la iglesia de Santa María in Cosmedin y la Boca de la Verdad. Bueno, esto último lo vimos desde las rejas. Quien quiera entrar y poner la mano para la foto típica tendrá que hacer una cola bastante larga. No creímos que mereciera la pena.
Visita imprescindible también es el espectacular monumento a Víctor Manuel II. Hasta aquí llegamos caminando aproximadamente 1km. Merece la pena subir arriba.
Por la tarde y después de comer, continuamos viendo algunos lugares importantes en el centro. Un ejemplo es el Templo de Adriano, la Columna de Marco Aurelio o el Panteón de Roma, esta vez con más luz.
Este día queríamos terminarlo en un mirador, algo recomendable en Roma. Primero fuimos a ver la famosa Plaza de España, muy concurrida de gente, como siempre. De aquí, y todo a pie, llegamos hasta la Plaza del Popolo, para subir al mirador del Pincio, muy bonito y recomendable. Desde aquí hay unas espectaculares vistas al atardecer, con la Basílica de San Pedro al fondo.
Por la tarde-noche habíamos reservado la visita a los Museos Capitolinos. Es el principal museo de Roma. Lo visitamos prácticamente solos, ya que a esa hora no había nadie. Son espectaculares las obras de todo tipo que podemos encontrar. Pusimos punto y final al día después de visitar el Coliseo Romano de noche.
Puedes pensar en hacer alguno de los tours más famosos e interesantes de Roma:
Día 3: Iglesias y Trastévere
Si hay algo que abunda en Roma son iglesias. Las hay por todas partes y casi todas son espectaculares. No importa que la veamos de casualidad en una calle poco turística. No importa si es grande o pequeña. Merece la pena entrar en todas las que podamos. Son realmente bonitas y cada una tiene algo diferente.
Este día visitamos algunas de las muchas que hay. La primera fue la Basílica de Santa María degli Angeli, que está en la Plaza de la República.
De aquí fuimos a la Basílica de Santa María Maggiore, una de las principales de Roma. Además, aquí dentro está la capilla Sforza, de Miguel Ángel.
También muy famosa es la iglesia de San Pietro in Vincoli. Más que por el propio templo, destaca sobre todo la estatua de Moisés, de Miguel Ángel.
Sin cambiar mucho de tema, aunque sí de lugar, fuimos hasta el barrio de Trastévere en tranvía para ver la iglesia de San Francisco a Ripa. Aquí dentro está la escultura de Bernini del Éxtasis de la Beata.
Aprovechamos para pasear un poco y visitar la Basílica de Santa María in Trastévere. Por la tarde teníamos pensado volver a este bonito barrio.
Nuestro siguiente destino fue el Castillo de San Ángelo. Aquí dedicamos sobre una hora para ver este espectacular lugar. Desde arriba, además, tenemos unas bonitas vistas de la ciudad. Lugar que merece la pena visitar siempre que tengamos el tiempo suficiente.
Después de comer volvimos paseando a Trastévere. La idea era ver el mirador de El Gianicolo. Personalmente recomiendo mucho más el mirador de la Plaza del Popolo. A la bajada vimos la Fontana dell’Acqua Paola.
Día 4: Mercado de Trajano y Fontana di Trevi
Con este pusimos fin a la ruta de 4 días por Roma. Lo dedicamos a ver los lugares que no habíamos visto o que habíamos pasado un poco de largo los días anteriores. Uno de ellos fue la Fontana di Trevi, que aunque habíamos estado en un par de ocasiones, siempre era de noche.
De aquí fuimos a ver el Mercado de Trajano, otro lugar muy recomendable para conocer la historia de Roma. Podemos ver obras y esculturas romanas muy bien conservadas. Incluso tienen maquetas de otros lugares del mundo donde llegó el Imperio Romano, como el Puente Romano de Alcántara.
Es un lugar para echar tiempo con tranquilidad. Merece la pena bajar hasta abajo y ver la inmensidad de lo que un día fue. Aquí pusimos punto y final al viaje de 4 días por Roma. Sin duda es un destino que hay que ver al menos una vez en la vida y recorrer sus principales atractivos turísticos.
Recomendaciones para visitar Roma
Lo primero es ser consciente de que hay que andar mucho. Más aún si vamos a hacer una ruta de 4 días por Roma. Es una ciudad con muchísimas cosas para ver, pero a la mayoría más o menos se puede ir andando. Además esa es la esencia de visitar Roma; pasear y descubrir calles, iglesias y lugares muy bonitos a cada paso.
Planifica bien tus días e itinerarios que vas a hacer. De esta forma podrás aprovechar mejor el tiempo y ver lugares que caigan de camino sin tener que andar largas distancias o perder más tiempo en transporte público. Llevar un buen orden es importante para ciudades grandes como esta y donde hay tantos atractivos turísticos.
Comprar la Roma Pass puede ser una buena opción. Es cierto que no siempre compensa. Depende de los lugares que vayamos a visitar y calcular si merece la pena o no. En nuestro caso nos interesaba coger la Roma Pass de 72 horas. Puedes ver las condiciones de la Roma Pass en su web oficial y comprobar si te interesa o no.
Por supuesto no puede faltar disfrutar de la gastronomía. Probar los helados, pizzas y pasta es algo que debes hacer. Pero no siempre en los lugares señalados en las guías. No nos guiemos únicamente por lo más famoso. Hay muchos establecimientos menos turísticos y donde podemos comer mucho menor, más tranquilos y más baratos.
Coste de ir a Roma
El llegar hasta la capital italiana es muy sencillo y económico. Existen diferentes rutas y compañías aéreas desde España, a precios muy competitivos. Hay aerolíneas Low Cost desde muchos aeropuertos y con suerte puedes encontrar combinaciones muy baratas. Por otra parte, el transporte en Roma no es caro, como tampoco lo es ir hasta los aeropuertos.
La ciudad en sí podríamos decir que es cara. No se asemeja a Europa del norte, ni mucho menos, pero en general comer y el día a día puede resultar algo elevado de precio. Es un sitio bastante turístico y lógicamente el coste del alojamiento va a subir. Especialmente si vas en temporada alta, puedes tener problemas para encontrar cosas baratas.
🛏 En nuestro caso nos hospedamos en el YellowSquare Rome. Tiene habitaciones privadas y también compartidas. Estuvo muy bien.
Sí quiero puntualizar el caso de los atractivos turísticos. Algunos tienen un precio que lo considero abusivo. Por ejemplo la entrada al Mercado de Trajano o al Castillo de San Ángelo. Pero bueno, estamos hablando de una de las ciudades más visitadas del mundo.
El tema de alojamiento, al menos en temporada baja, no es excesivamente caro. Se puede asemejar a la media de Europa occidental y central. En verano muy probablemente esto aumente bastante, como ocurre en otras ciudades muy turísticas.
Mapa de localización: