Excursión al Parque Nacional de Gauja desde Riga
El Parque Nacional de Gauja es un lugar ideal para hacer una excursión de un día desde Riga. Es uno de los espacios naturales de los declarados «parque nacional» que hay en Letonia, con partes boscosas donde, aparte de la naturaleza, podemos visitar algunos castillos o la cueva más grande de las Repúblicas Bálticas. En este artículo te cuento los principales sitios que visitar en Gauja y como realizar la ruta a pie, llegando en transporte público.
Ruta de un día por el Parque Nacional de Gauja
El Parque Nacional de Gauja es bastante amplio, pero es posible visitar sus lugares más interesantes en un día usando el transporte público y caminando unos cuantos kilómetros por el bosque. Es un trekking entretenido pero tampoco se hace excesivamente duro.
A continuación detallo la ruta que hice por este parque nacional de Letonia en un viaje por las Repúblicas Bálticas en primavera de 2017. Fue un plan bastante improvisado pero la ruta salió muy bien. Recomendaría el mismo recorrido a quien quiera visitar Gauja en un día. También añado algunos lugares que no pude visitar por falta de tiempo pero son factibles si vas en coche o pasas más tiempo en la zona.
Al final del artículo añado un mapa con la ruta que hicimos caminando y otro de MyMaps con los puntos de interés de los que voy hablando en el artículo.

Cómo llegar de Riga a Sigulda
La ruta comienza en la población de Sigulda. Hay muchas conexiones de autobuses y trenes entre Riga y Sigulda, en ambos casos se tarda 1 hora en hacer el trayecto. En nuestro caso hicimos la ida en bus y la vuelta en tren, por probar ambos medios de transporte y porque nos encajaban mejor los horarios. La estación de tren y la parada del bus de Sigulda es el mismo sitio por lo que no hay pérdida. En Riga están más o menos cerca ambas estaciones.
Hay autobuses cada media hora o menos. Los trenes varían su frecuencia depende la hora del día, pero también hay muchísimas opciones.
El precio del transporte en Letonia es muy económico. El autobús de Riga a Sigulda cuesta unos 3€ y en el caso del tren son 2€. Se pueden comprar los tickets online en la web oficial de autobuses o la web oficial de trenes, aunque habiendo tanta frecuencia recomendaría ir directamente a la estación y comprar el ticket en taquilla.

Qué ver en Sigulda, la puerta de entrada al Parque Nacional de Gauja
Sigulda es un municipio de algo más de 10.000 habitantes a orillas del río Gauja. Está bien conectada en transporte público con la capital, Riga. Desde aquí visitamos todos los lugares caminando directamente desde la estación.
Dentro de la propia población hay varios lugares interesantes que ver, así como alguna actividad deportiva / aventura muy llamativa. A continuación, los principales lugares que ver en Sigulda.
Castillo de Sigulda
En Sigulda hay dos castillos uno al lado del otro. El primero que encuentras al llegar es el Castillo de Sigulda, también conocido como «castillo nuevo de Sigulda», construido en el siglo XIX. No es visitable por dentro ya que actualmente es un edificio gubernamental, pero se puede pasear por sus jardines. En nuestro caso estaba cerrada la puerta al jardín así que solo pudimos verlo desde fuera.

Castillo medieval de la Orden de Livonia
Un poco más adelante del castillo nuevo está el Castillo de la Orden de Livonia. Fue construido en la época medieval, en el siglo XIII, y actualmente solo quedan sus ruinas y algunas partes interiores que han sido restauradas. Se puede visitar pagando una entrada económica (2€ o 1€ con carnet de estudiante).

Iglesia evangélica luterana de Sigulda
Esta iglesia cae de camino hacia los dos castillos de Sigulda. La verdad es que no tiene nada excepcional, pero está en un sitio bonito, rodeada por un parque con un pequeño lago. Podemos hacer una primera parada aquí y verla por dentro si está abierta en ese momento.

Bobsleigh en Sigulda
Esta es una de las actividades más emocionantes que puedes hacer en Sigulda. El bobsleigh es un deporte olímpico de invierno que cuenta con varias modalidades. Muy resumidamente, consiste en deslizarse por una estrecha pista subido en una especie de trineo, a gran velocidad.
Hay menos de 20 pistas de bobsleigh en todo el mundo y la de Sigulda es especial, ya que (según su web) es la única accesible para visitantes que quieran probar este deporte. Se puede practicar tanto en invierno, con los trineos originales, como en verano, con unos trineos adaptados con ruedas. En ambos casos, tiene pinta de ser emocionante. El precio es de 10€.
En nuestro caso tuvimos mala suerte ya que en los días que estuvimos estaba cerrada por mantenimiento y no pudimos probarlo.

Ruta desde Sigulda por el Parque Nacional de Gauja
A continuación, nos adentramos en el Parque Nacional de Gauja desde Sigulda. La idea era dar una vuelta por Sigulda y luego cruzar el río para visitar distintos lugares en el otro lado, terminando en el Castillo de Turaida. Una vez allí, cogimos un bus de vuelta a Sigulda, para no deshacer todo el camino que era bastante.

En Sigulda, comenzamos el camino de bajada hasta el río por un sendero que nace al lado de la parada del teleférico (ver mapa abajo). Este camino desciende rápidamente, con tramos de pasarelas de madera con escaleras, hasta llegar al puente que cruza el río Gauja. En el otro lado del río, comienza una subida intensa hasta lo que parece un pequeño pueblo.
Allí encontramos alguna cafetería donde tomar algo. Nosotros paramos en «Milly» a comer para coger fuerzas. Al lado se encuentra un edificio bastante impresionante para encontrarse ahí en mitad del bosque, con una entrada con columnas, aunque no estaba en el mejor estado de conservación. Se trata del Hotel Krimulda.


Castillo de Krimulda
Siguiendo las señales, en unos minutos pasamos por una alta torre que sirve como estación del teleférico que viene desde Sigulda cruzando el río. Unos metros más adelante llegamos al Castillo de Krimulda.
El Castillo de Krimulda está completamente en ruinas, solo quedan algunos muros y paredes. Fue construido en el siglo XIV pero en 1601 se destruyó por completo debido a una guerra. Sin embargo, el entorno es bastante bonito, rodeado de naturaleza en pleno parque nacional.

Cueva de Gutmanis, la cueva más profunda de los países bálticos
Desde las ruinas del castillo, podemos seguir diferentes senderos que nos llevan a la Cueva de Gutmanis. Algunos son más duros que otros por el desnivel, con largos tramos de escaleras, pero igualmente bonitos.

La Cueva de Gutmanis es un lugar interesante, con una leyenda detrás con cierto parecido a Romeo y Julieta. Tiene un tamaño considerable, pero es todo visitable desde el exterior, al aire libre.
Lo que más me llamó la atención fueron las inscripciones que tiene en la roca. Desde hace muchos años, los visitantes han ido dejando su huella tallando la roca. Hoy en día está protegido y es ilegal hacerlo. En el exterior hay partes bastante bonitas llenas de escudos de familias o algo similar.


Después de ver la Cueva Gutmanis, pusimos rumbo a la última parada de la ruta: el Castillo de Turaida.
Castillo de Turaida
Este castillo es también de origen medieval pero está bastante mejor conservado que los demás que vimos durante el día. Esto se debe a que ha sido restaurado en los últimos años, ya que llegó a estar bastante ruinoso. Es visible desde los alrededores al estar situado en una colina elevada.
Desde el cruce de las carreteras P7 y P8 (ver mapa) hacia abajo hay varias cosas que ver antes de llegar al castillo. Justo en la entrada hay un museo del castillo y tradiciones.

Un poco más adelante, nos encontramos con la tumba de la Rosa de Turaida. Esta chica, que solo vivió apenas 19 años, es la protagonista de la leyenda amorosa que comentaba al hablar de la Cueva de Gutmanis. Si te ha dejado intrigado el tema, puedes leer más información sobre ello.
Al lado del sepulcro de la Rosa de Turaida está la Iglesia evangélica luterana de Turaida. Construida en madera todo el exterior e interior, muy bonita.
Por último, desde la iglesia y en dirección al castillo, podemos desviarnos a la izquierda y subir a un prado lleno de grandes esculturas de piedra, una especie de museo al aire libre. También curioso de ver.
En el propio Castillo de Turaida podemos culminar la visita subiendo a la torre, desde donde obtendremos unas vistas panorámicas de todos los alrededores del parque nacional de Gauja en general.

Tras visitar el Castillo de Turaida volvimos al cruce anterior de las carreteras P7 y P8. Allí hay una parada de autobús donde nos montamos para volver de vuelta a Sigulda y deshacer la ruta caminada durante todo el día. En el mapa de abajo dejo marcado el punto donde está la parada de autobús.
Una vez en Sigulda, como comenté más arriba, cogimos el tren de vuelta a Riga.
Bonus: Castillo de Cesis
El castillo de Cesis es otro de los castillos que hay en el Parque Nacional de Gauja. Está más alejado que los que vimos en nuestra visita. En nuestro caso no nos dio tiempo a verlo ya que era imposible cuadrar el transporte público para ver todo en un día, así que fue lo que descartamos.
Pero si estás haciendo la ruta en coche o vas a estar más días por la zona, es un sitio que recomendaría por las fotos que he visto. Se tarda media hora en coche desde Sigulda.

Mapa de la ruta caminando (algo más de 9km en total)

Mapa de localización