La fábrica de Guinness, uno de los iconos de Dublín e Irlanda
La Guinness es sin duda la cerveza más famosa de Irlanda y conocida en medio mundo. Si visitamos Dublín, veremos productos relacionados con esta bebida por todas partes, desde camisetas hasta vasos con su logo. De hecho uno de los lugares más visitados de la capital irlandesa es la fábrica de Guinness y en este artículo vamos a contar todo lo relacionado con la visita, precios, recomendaciones, etc.
Fábrica de Guinness
Detrás de Guinness hay una larga y curiosa historia. La fábrica se encuentra en la parte occidental de Dublín y es todo un reclamo turístico. Si preguntas a alguien que haya visitado la ciudad por los sitios que ha visto, casi seguro que responderán: Temple Bar y la fábrica de Guinness.
En la visita podemos conocer la historia de la fábrica y de la cerveza. Los procesos de elaboración, los ingredientes que utilizan, así como diferentes paneles interactivos para ver cómo ha cambiado a lo largo de los años. Esto podrá resultar más o menos interesante según lo que nos guste el tema.
Una de las primeras cosas que podemos ver a la entrada es la copia del contrato firmado entre Arthur Guinness, fundador de la empresa, y el Ayuntamiento de Dublín, en 1759, por el que la cervecera pagaba 45 libras anuales durante 9.000 años. Todo un chollo para nuestro tiempo, pero seguro que el consistorio dublinés hasta cedería el suelo gratis viendo todo lo que mueve en cuestión de turistas y dinero.
Podemos ver también una exposición sobre los cuatro ingredientes principales que componen la cerveza: agua, lúpulo, cebada y levadura.
En total son seis plantas en las que podemos ver tiendas, espacios para conocer la historia del edificio desde que fue construido en 1904 hasta el año 2000, cuando fue abierto a los visitantes, así como muchos paneles interactivos.
En la quinta planta podemos echar nuestra propia pinta de Guinness donde somos guiados por un especialista. Explica la peculiar manera para que salga la pinta perfecta y podemos beberla, claro. Como curiosidad, te dan un diploma personalizado. Esto antes estaba incluido en el precio de la entrada estándar, pero actualmente solo se puede hacer si se compra la entrada que cuesta 32€.
En la azotea, donde se encuentra el Bar Gravity, la zona más alta de la fábrica, podemos beber otra pinta cortesía de la casa. Desde aquí tenemos unas vistas 360 de parte de la ciudad de Dublín, aunque la verdad es que no es el mejor mirador. No obstante, si vas a visitar la fábrica de Guinness es un lugar al que debes acceder.
Cerveza Guinness
En la actualidad la cerveza Guinness es, como hemos indicado, todo un símbolo para Irlanda. Pero hay una curiosidad que no mucha gente sabe: el icono de esta cerveza es un arpa, pero si nos damos cuenta es también el símbolo de la República de Irlanda. Sin embargo hay una diferencia notable: está al revés.
La razón es que Guinness registró el arpa como marca propia, por lo que cuando el gobierno irlandés quiso utilizarla como símbolo nacional, tuvo que colocarla de forma invertida.
Actualmente, adaptándose a la demanda, está disponible Guinness 00. De hecho, cuando haces la visita, al darte una pinta de cortesía te dan a elegir la clásica, con alcohol, y también la versión sin alcohol. Eso es algo que hasta hace poco no era posible. Una buena idea para quienes no beban alcohol o simplemente no les apetezca en ese momento y así poder aprovechar lo que han pagado.
Cómo visitar la fábrica de Guinness
Puedes visitar la fábrica de Guinness de Dublín por tu cuenta y también a través de visita guiada. De hecho, si coincides en un día en el que hay visita guiada en español con Civitatis, la entrada te cuesta bastante más barata y además incluye la visita. Puedes también comprar la entrada por Internet, directamente en su página web y ver las diferentes opciones que tienen. No obstante, la entrada la puedes comprar directamente allí, una vez llegas.
La visita incluye un recorrido por la historia de la famosa cerveza negra de Irlanda, su fabricación y también la visita a la parte de arriba. Es ahí donde puedes canjear tu entrada por una pinta de Guinness y poder disfrutar de esta buena cerveza directamente en su fábrica. Más o menos puedes calcular unos 90 minutos para toda la visita. No obstante, esto dependerá también de tu interés, ya que puede que tardes menos o más.
Precios
La entrada no es económica y actualmente cuesta 20€. Hay descuentos por edad. Los niños de 5 a 17 años pagan 10€ y los mayores de 65 años o los estudiantes (piden documento para acreditarlo) pagan 17€. Esta es la entrada básica, que te permite realizar una visita por ti mismo a la fábrica de Guinness. Con la entrada te incluye una pinta de Guinness (que puede ser también sin alcohol o alguna bebida no alcohólica), que normalmente suele costar 6-7€ en la mayoría de pubs de Dublín.
Más allá de la entrada normal, que cuesta los mencionados 20€, también puedes comprar por 28€ una entrada que incluye una segunda pinta y te dibujan de alguna manera tu cara. Los estudiantes y mayores de 65 años pagan 23€. La opción de 32€ incluye el poder echar tu propia pinta de Guinness y obtener un diploma (te enseñan a servir la cerveza de forma profesional). En este caso, la entrada reducida para estudiantes y mayores de 65 años es de 26€.
Horarios
La fábrica de Guinness abre todos los días del año (excepto viernes Santo, Nochebuena, Navidad y 26 de diciembre). De lunes a viernes abre de 10:00 a 17:00h. Los sábados abre de 09:30h a 18:00h (último acceso a las 17:00h) y los domingos de 09:30 a 17:00h. Ten en cuenta que la visita recomendada es de unos 90 minutos, por lo que cierran sobre 2 horas antes y ya no permiten entrar, aunque puedas seguir dentro.
Cómo llegar
Se encuentra a unos 2 kilómetros del centro de Dublín, de la zona del Temple Bar. Se puede ir andando echando un paseo, pero para aquellos que prefieran ir en transporte público, en autobús desde O’Conell Street hay que tomar la línea 123 que pasa cada 8-10 minutos y tarda unos 10 minutos.
Otra opción para llegar del centro de Dublín a la fábrica de Guinness es en taxi o Uber. Puede costarte unos 12-15€ el trayecto por ejemplo desde el puente de O’Connell. Si vais varias personas puede salir más o menos como pillar un bus urbano y será más rápido y cómodo.
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